Cuando hablamos de instalaciones de electricidad, uno de los conceptos más recurrentes es el de la tensión eléctrica. Es fundamental, puesto que determina la corriente necesaria para el funcionamiento de diferentes instalaciones, según sus necesidades.

Por eso, en este post o queremos hablar sobre la tensión eléctrica, sobre lo que significa y las diferencias entre los tipos de tensión eléctrica, en función de su voltaje.

¿Qué es la Tensión Eléctrica?

Podríamos definir la tensión eléctrica como la presión o fuerza de una fuente de energía eléctrica para transmitir una corriente de un punto a otro. Es decir, la tensión eléctrica es esa diferencia de potencial. Se conoce también como voltaje y se mide en voltios.

Como bien sabéis, la electricidad es un fenómeno físico que surge entre dos puntos donde existe una diferencia de carga, conectados por un conductor. El punto con mayor potencial cede parte de su carga al de menor potencial, hasta que existe un equilibrio de potencial entre ambos.

Tipos de Tensión Eléctrica

Según el voltaje de la instalación, existen tres tipos de instalaciones., según la propia reglamentación eletrotécnica de España. Vamos a ver cada una de ellas, desde el punto en el que se transporta la corriente eléctrica, hasta su distribución y consumo.

Recuerda que, en Arona Systems, nos encargamos de instalaciones eléctricas de todo tipo, ¡consúltanos!

Alta Tensión

La electricidad se genera, como bien sabéis, en grandes centrales, como centrales térmicas, hidráulicas o nucleares. La ingente cantidad de electricidad se tiene que transportar, en un primer momento, a largas distancias, hasta llegar a las subestaciones eléctricas.

Por ello, se realiza mediante una instalación de alta tensión, ya sea subterránea o mediante torres eléctricas. Para que la instalación se considere de alta tensión, debe de superar los 36 kV de voltaje.

En Arona Systems, realizamos trabajos de diseño de instalaciones de alta tensión o mantenimiento de las mismas, puedes consultarnos sin ningún tipo de compromiso.

Media Tensión

Como hemos comentado, la corriente eléctrica, desde las grandes centrales acaba alcanzando las subestaciones eléctricas. Es, desde aquí, desde donde se va a proceder a la distribución de la electricidad.

Ahora bien, para evitar riesgos innecesarios, se transforma, pasando de un voltaje de alta tensión a media tensión. Si bien es cierto que no hay un reglamento específico sobre instalaciones de media tensión, pero se establece que es aquella que está entre 1 y 36 kV.

Tal y como sucede con las instalaciones de alta tensión, se transporta mediante torres eléctricas o por vía subterránea. En algunos casos, se puede requerir de una instalación de media tensión, debido a que necesitan de una gran cantidad de electricidad y que deben de funcionar de manera independiente, en caso de corte eléctrico. Un buen ejemplo es el de hospitales o aeropuertos.

Baja Tensión

Finalmente, vamos a hablar por la tensión eléctrica que utilizamos todos los días: la baja tensión. Precisamente, transportada desde subestaciones eléctricas a pequeños transformadores, se pasa a la línea de baja tensión.

Desde ahí, se distribuye a cada hogar y comercio. En este caso, cuando se habla de corriente alterna, hablamos de que el límite debe de ser inferior a 1 kV, mientras que para una corriente continua, de 1,5 kV.

A pesar de que implica un menor riesgo, siempre que se quiera manipular este tipo de instalaciones ,es necesario contar con un profesional. En Arona Systems, contamos con profesionales con una amplia experiencia en las instalaciones de baja tensión.